Los ‘Jinetes de Plata’: La proeza del equipo chileno de equitación en los Juegos Olímpicos de Helsinki 1952
Chile llegó a Finlandia luego de ser campeón panamericano.
Chile llegó a los Juegos Olímpicos de Helsinki en 1952 con la ilusión de volver a conquistar una medalla, que no conseguía desde Ámsterdam 1928 cuando Manuel Plaza alcanzó una presea de plata en el maratón, y una de las opciones estaba en la equitación, donde se llegaba como campeón panamericano vigente tras el título en Buenos Aires 1951.
Si bien equipos como Francia, Alemania e Inglaterra emergían como adversarios difíciles de superar gracias a su tradición ecuestre, había un factor que daba opciones a representantes de otras latitudes, ya que la Segunda Guerra Mundial había mermado las caballerizas.
La proeza del equipo chileno de equitación en Helsinki
Los viajes a esas alturas de la historia de la humanidad debían desarrollarse en extensas travesías en barco, trayecto que se ensañó con Chile, ya que a poco de zarpar de Buenos Aires los atacó una potente tormenta en alta mar, cuyos principales perjudicados fueron los caballos. Se rompieron las pesebreras, y uno de los corceles, ‘Julepe’, terminó muriendo.
Al llegar a Europa quedó fuera de los Juegos Alberto Larraguibel, vigente récord del mundo en salto, y se les lesionó “Scarface”, caballo con el que Óscar Cristi había ganado un torneo en Estados Unidos, por lo que este jinete junto a César Mendoza y Ricardo Echeverría quedaron sin opciones de refresco, y ‘Bambi’, ‘Pillán’ y ‘Lindo Peal’ tendrían que afrontar la totalidad de la competencia.
La larga travesía también atentó contra el estado en forma de los caballos, por lo que se llegó a la cita olímpica con clara desventaja. Pero por esos años la equitación chilena estaba en muy bien nivel y terminaría sorprendiendo el 2 de agosto de 1952.
Los ‘Jinetes de Plata’
Esa misma jornada a primera hora comenzó el concurso grupal y luego el individual en su ronda clasificatoria, que le permitieron al equipo chileno acceder a la ronda definitoria.
Luego de la clasificación, en la tarde por la disputa de medalla, Echeverría y Cristi dejaron al equipo relegado, sin bien sus actuaciones fueron correctas, no dieron para sobresalientes, pero César Mendoza junto a Pillán tuvieron o cometido impecable. El binomio completó el recorrido de forma perfecta, sin falta alguna, lo que dejó a nuestro país en el segundo lugar, sólo superado por el Reino Unido, integrado por Wilfred White en ‘Nizefela’, Douglas Stewart con ‘Aherlow’ y Harry Llewellyn junto a ‘Foxhunter’.
Chile ese 2 de agosto alcanzó su segunda medalla de la historia, nuevamente de plata, y fue con características de hazaña por todo lo que vivió ese equipo ecuestre, que superó no sólo los obstáculos en la pista, también a lo largo de toda la gira.