El volante de Universidad de Chile David Pizarro conversó con Al Aire Libre en Cooperativa, en donde se refirió al presente del fútbol chileno y a sus planes a futuro tras su retiro de la actividad, criticando cómo se arman los equipos a la hora de entrar a la cancha.

El "Fantasista" comenzó hablando de su intención de trabajar como entrenador, asegurando que "a mí me gusta mucho la parte formativa, creo que eso es lo que más me apasiona sobre todo porque tuve la suerte y la fortuna de tener grandes maestros. Yo ya estoy en una etapa en la que quiero entregar todo eso que pude aprender y poder plasmarlo en Chile, porque esa es mi idea".

Al ser consultado por las diferencias que él aprecia entre lo que pasa en Europa y en nuestro país, el mediocampista dijo que "acá se mira mucho el nombre en la espalda, allá no. Allá juega el que está mejor, es competencia todos los días. No se puede aflojar".

"Mi idea es trabajar con la gente que quiera ser parte de este cambio, lo mío va por ahí. El tema mental, de las personalidades, de ir a afrontar ciertos tipos de situaciones, ciertos rivales y canchas, que es donde estamos un poco al debe en todo sentido. En estos tres años que llevo acá he visto que el futbolista en general entró en una zona de confort demasiado peligrosa", indicó.

Sobre lo mismo, "Pek" aseguró que "nosotros somos muy buenos para esto, pero tenemos que empezar a cambiar nuestra mentalidad. Gran parte de las sociedades anónimas no han dado el resultado que hemos querido. Es de esperar de que esto se pueda cambiar porque nosotros queremos a todos los equipos llegando a instancias importantes".

En relación al conflicto de Johnny Herrera con la dirigencia, Pizarro aseveró que "por lo que me pasó en Valparaíso, creo que Johnny con Carlos (Heller) necesitan una conversación entre ellos. No me gustaría que Johnny saliera por la puerta de atrás, al contrario. Su despedida debería ser la mejor de todas".

Santiago Wanderers

A su vez, el formado en Santiago Wanderers le dedicó unas palabras a los hinchas del cuadro porteño, elenco al que volvió para retirarse del fútbol, pero del que salió de manera abrupta por conflictos con la dirigencia. 

"Ellos saben muy bien lo que pasó y mis valores están intactos. En cierta manera gente puntual me la hizo pasar y tuvieron la gran certeza de 'girarme la tortilla'. Pero son mis raíces, siempre lo he reconocido, llevé el nombre de Wanderers por todo el mundo y por lo que me hicieron no los voy a borrar, al contrario, quiero que les vaya muy bien porque soy de allá y porque me permitieron ser un profesional", apuntó.