La estatua erigida a Cristiano Ronaldo en Funcha, ubicada en la isla portuguesa de Madeira, fue víctima de un acto vandálico el mismo día en que el argentino Lionel Messi era premiado frente a él con el quinto Balón de Oro.

Según informó el medio luso Diario de Noticias, la escultura sufrió rayados en el sector de la espalda, emulando una camiseta del trasandino: El responsable escribió 'Messi' y puso el número '10'.

Dicha acción generó reacciones indignadas por parte de la hermana del astro portugués, Katia Aveiro, quien sostuvo que el culpable era un "salvaje" y que debería "vivir en Siria".

La estatua fue inaugurada el 2014 y alcanza los con 3,40 metros, pesando 800 kilos.