Tras una reunión con los dirigentes de Universidad de Chile y Unión Española, persones de la ANFP y Carabineros, la Intendencia de la Región Metropolitana informó sobre las medidas de seguridad para las finales del Torneo de Apertura.

El intendente, Iván Garafulic, indicó que se autorizó el Estadio Santa Laura para la revancha del martes 7 de julio, pero con un límite de 18.000 espectadores, que se desglosan en 13.000 para la hinchada hispana y 5.000 para los azules.

Sólo 18 mil personas podrán ver la final del Apertura.

El martes 7 no se venderán entradas en el recinto de la comuna de de Independencia para evitar aglomeraciones y choques entre barras.

Sobre la opción que los fanáticos estudiantiles compren más entradas que las establecidas por la autoridad, el gerente de Unión Española, Eduardo Azargado, sostuvo que es una posibilidad que tienen "clarísima", pero le restó dramatismo.    

"Queremos tener un estadio donde no nos movamos. Lo más probable que suceda que la gente de la U comprará más boletos que esa cantidad, pero aún así creo que no tendremos problemas. A gente de la U irá a disfrutar del fútbol y no tenemos ningún problema con su hinchada", dijo Azargado. 

Ese partido se jugará desde las 19:00 horas (23:00 GMT).

El encuentro de ida de este sábado 4 de julio se disputará desde las 16:00 horas y las puertas serán abiertas a las 13:00 horas.

En el Estadio Nacional, escenario del primer duelo entre azules e hispanos, se venderán boletos hasta las 12:00 horas del sábado.