El tenista chileno Robinson Méndez se mostró apenado luego de que se rompiera su silla deportiva en el vuelo que lo llevó a Alemania, en la antesala de viajar a Londres, donde disputará los Juegos Paralímpicos de Londres 2012.

"Es una pena, llegamos antes de ayer (lunes) a Berlín a jugar un torneo previo y al recoger las maletas veo que mi silla deportiva estaba toda doblada, el marco de la silla estaba doblado. Una pena en verdad, porque me esforcé en años de entrenamientos para poder clasificar, y por una cosa extra, tener que vivir esto, es una pena", dijo el chileno en diálogo con Al Aire Libre en Cooperativa.

Más allá de la pena, Méndez está igualmente consciente de que sus opciones bajan al competir en una silla que sea la suya.

"Disminuyen mucho. Es como jugar con las cuerdas semicortadas", dijo el nacional.

Los plazos

Méndez viajó en un vuelo de Air France y aunque le prometieron comprarle una nueva, los plazos no dan como para que llegue a Londres con una nueva silla.

"La gente de la línea aérea me dijo que busque como repararla, lo hice en la fábrica alemana y me dijeron que no tenía arreglo, pero de todas maneras me la vana pagar, pero no es mucho, porque una silla nueva tarde un mes y algo en hacerse, por las medidas de cada uno, por la discapacidad de cada uno. Además es cara, de titanio, de fibra de carbono, y de cinco mil dólares", explicó.

Igualmente Méndez cree que dará la pelea. "Juego mañana jueves (en un torneo de Berlín), y me conseguí una con un club alemán, y trataré de ponerla a punto para lo que quiero. Veré qué pasa, están los golpes, pero la movilidad tarda mucho en acomodarse, pero es lo que hay, no quiero dejar mal a mi país e iré a competir, darlo todo en la cancha", comentó Méndez, quien además agradeció al IND y al Coch por mostrar inmediata preocupación tras el desgraciado hecho.