Todas las Noticias de Deportes Iquique Todas las Noticias de Universidad de Chile Todas las Noticias de Cobreloa Todas las Noticias de O'Higgins Todas las Noticias de Palestino Todas las Noticias de Colo Colo Todas las Noticias de Everton Todas las Noticias de Unión Española Todas las Noticias de Ñublense Todas las Noticias de Huachipato Todas las Noticias de Coquimbo Unido Todas las Noticias de Universidad Catolica Todas las Noticias de Unión La Calera Todas las Noticias de Audax Italiano Todas las Noticias de Cobresal Todas las Noticias de Copiapó

Atleta invidente impuso récord en caminata por el Gran Cañón de Arizona

Shawn Cheshire logró un máximo registro mundial con su hazaña.

Foto: EFE Atleta invidente impuso récord en caminata por el Gran Cañón de Arizona
Llévatelo:

La atleta paralímpica estadounidense Shawn Cheshire acaba de establecer un récord mundial al ser la primera mujer ciega que camina 42 millas (67,59 kilómetros) de borde a borde del Gran Cañón, en Arizona, recorrido catalogado como uno de los más peligrosos.

La 11 veces campeona nacional en Tandem Cycling (bicicleta para dos personas) emprendió el camino el domingo en la medianoche con tres amigos que le sirvieron de guías.

El lunes al mediodía estableció un tiempo récord -debido a su condición de invidente- de 24h15'.

Michael Mena, uno de los promotores de la carrera de Cheshire, dijo a EFE que este reto se realizó gracias a la gran perseverancia de la atleta, quien se preparó físicamente con anticipación.

Nacida en Texas en 1975, Cheshire sirvió en el ejército estadounidense como mecánica de helicópteros durante 8 años, pero, debido a una lesión, fue licenciada con una baja honorable. Después de dejar el ejército, trabajó en una ambulancia en Syracuse, Nueva York.

Un día nevado se encontraba auxiliando a un paciente cuando resbaló en el hielo y se golpeó la cabeza con la parte trasera de la ambulancia. La caída provocó una lesión cerebral que le hizo perder la vista.

Entonces con 34 años, el diagnóstico de invidencia le provocó una gran depresión, pero el hospital adonde asistía a terapias le recomendó la actividad física. Fue así como comenzó a correr con una guía y más tarde se introdujo en el ciclismo en la modalidad de tándem.

"Me pasó algo que fue muy trágico y me robó muchas cosas que nunca volveré a tener, pero pude encontrar una manera de convertirlo en algo para ayudar a alguien, y eso hace que valga la pena", dijo Cheshire.

La atleta no solo quería que su viaje fuera desafiante e histórico, sino que también inspirara a otros que enfrentan limitaciones similares en la vida.