Luego del importante triunfo obtenido por la selección nacional sub 23 en la semifinal ante Costa de Marfil, la segunda defición presentó como ganador a la escuadra de Italia, quien dejó en el camino a Japón por la vía de los lanzamientos penales.

 

El conjunto europeo se transformó en el rival de Chile para dirimir al campeón del torneo "Esperanzas de Toulon", luego de igualar 0-0 en los 90 minutos reglamentarios y después vencer por 5-4 en la tanda desde los 12 pasos.

 

Bajo una torrencial lluvia y tras un intenso partido, marcado por lo trabado de su trámite y con ambos equipos tratando de sentar supremacía con los argumentos característicos de su funcionamiento, al término del partido no hubo un vencedor.

 

En la definición vía expediente penal, la escuadra azurra fue mucho más certera que su rival, ya que los asiáticos fallaron el cuarto disparo, el cual desencadenó la definición en el Stade Mayol de Toulon.

 

Dentro de las características más importantes del cuadro dirigido por Pierre Luigi Casiraghi destacan el ordenamiento defensivo, el funcionamiento táctico impecable y un poder de concreción que define en los momentos justos, tal como lo hizo para adjudicarse de manera invicta el Grupo B. (Cooperativa.cl/Agencias)