Este jueves se confirmó el peor temor de los hinchas de Barcelona, ya que el club informó mediante un comunicado de prensa que terminó su vínculo con Lionel Messi, el mejor jugador de la historia de la institución, al que formó desde el año 2000 y disfrutó en el profesionalismo durante los últimos 17 años.

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La "pulga" quedará a fuego grabada en los corazones "blaugranas", dado que es el máximo goleador del club con 672 anotaciones, el que más asistencias dio con 268, pero por sobre todo el que engrandeció aún más la gigantesca historia del equipo, ganando cuatro Champions League y 10 ligas españolas, dejando además recuerdos imborrables en los derbis contra Real Madrid.

Sus primeros pasos

La historia de Messi con Barcelona nació el primer año del siglo XXI. La Masía rescató a un futbolista que había brillado en las inferiores de Newell's, pero que había recibido la negativa de River Plate por su pequeña estatura.

En Cataluña vieron las aptitudes del futuro crack y junto con hacerle un tratamiento para crecer, también le dieron herramientas para mejorar su potencial. El resultado: Gran figura en las juveniles y un rápido ascenso al primer equipo.

El 16 de noviembre de 2003 llegó la primera experiencia del rosarino en el equipo estelar "culé", en un amistoso contra Porto de José Mourinho, pero fue el 16 de octubre de 2004 que jugó de forma oficial, en un clásico contra Espanyol, bajo la dirección técnica de Frank Rijkaard, mostrando de inmediato que no iba a ser cualquiera en el fútbol europeo.

Desde ahí solo loas y participación paulatina para el trasandino hasta que por fin pudo plasmar en números las esperanzas que había en él, marcando su primer tanto el 1 de mayo de 2005 ante Albacete, siendo hasta ese momento el jugador más joven en marcar en la liga española, con 17 años, 10 meses y siete días (récord pulverizado en 2012 por el camerunés Fabrice Olinga).

Ese año festejó su primera liga, pero su primer gran logro fue la Liga de Campeones de 2016 (en París ante Arsenal), aunque sin jugar mucho, por lo que aún no podía hablarse de una estrella mundial, como sí lo era su compañero de equipo Ronaldinho, uno de los gestores de esa corona.

Su salto para ser estrella mundial

No obstante, poco tiempo demoró en ser una megafigura mundial. llegando a punta de títulos a su momento cumbre con los "azulgranas", el que se produjo primero con la Champions League de 2009, venciendo en la final a Manchester United por 2-0 en Roma, marcando uno de los goles y siendo el mejor jugador del torneo, logro que al final de ese año le valió ganar su primer Balón de Oro.

Tras esto, siguió cosechando éxitos interminables en el club (los que no se repetían en la selección argentina), ganando la Champions de 2011 también ante los "diablos rojos" en el Barcelona de Pep Guardiola, y quedándose con el Balón de Oro de forma consecutiva hasta 2012, siendo inigualable durante todas esas temporadas, pese a que Cristiano Ronaldo se mudó en 2010 a Real Madrid, buscando amagar su dominio.

Fue el propio Cristiano el que le quitó por momentos su hegemonía, aunque de igual forma se las arregló para volver a ganar el Balón de Oro en 2015 y 2019, y entre medio para convertirse en el máximo goleador histórico de su club, logrando esa distinción también en la liga española y la Champions, aunque en esta última, fue superado por CR7 (134 contra 120).

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Además, compartió con tres chilenos durante todo este período: Alexis Sánchez (2011-2014), Claudio Bravo (2014-2016) y Arturo Vidal (2018-2020), teniendo buena relación con todos, aunque con este último llegando a una amistad que perdura hasta hoy, y que se demostró cuando despidió de forma cariñosa al "Rey" del club a mediados de 2020.

Lionel Messi despidió a Arturo Vidal: "Te hiciste notar mucho, el vestuario te extrañará" #CooperativaEnCasa https://t.co/9OxAe8qOgw pic.twitter.com/Ognrl6uoF1

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Pese a todo esto, la última Liga de Campeones que ganó con el club fue en 2015 (en final contra Juventus de Vidal), y los fracasos deportivos hicieron que se desgastara su gusto por estar en Barcelona, siendo recordados los golpes que le dieron Roma en 2018 (le remontó un 4-1 en cuartos de Champions), Liverpool en 2019 (dio vuelta un 3-0 en semifinales) y Bayern Munich en 2020 (le ganó 8-2 en cuartos de final).

El terremoto y el inicio de su partida

Este último golpe propició el primer gran terremoto en la relación Messi-Barcelona, ya que en agosto de 2020 y tras un término de temporada retardado por la pandemia del coronavirus, el argentino expresó mediante un Burofax al presidente Josep Bartomeu su intención de terminar un año antes su contrato con el club, a propósito de una cláusula en el contrato.

Lionel Messi le comunicó a FC Barcelona que quiere emigrar #CooperativaEnCasa https://t.co/4ARwUkB7gi pic.twitter.com/qNQUywvAmQ

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Bartomeu hizo valer que esa cláusula terminaba el 30 de junio, por lo que Messi si quería irse debía pagar cerca de 1.000 millones de euros, cifra exorbitante y que terminó con la "pulga" por un año más en Cataluña.

En ese año, que fue el último, parecía que el trasandino se había reencantado con el club, tomando en cuenta además el regreso del presidente Joan Laporta, en desmedro de Bartomeu. Además, Messi consiguió su primer Copa América con Argentina y parecía estar animado con la renovación en Barcelona, pero su alto costo terminó jugándole una mala pasada y pese a que ahora sí quería seguir, la institución debió privarse de él para cumplir con el Fair Play Financiero, y no pudo renovarle.