Jordhy Thompson aceptó salida alternativa en juicio por violencia de género
El futbolista quedó sometido a una vigilancia.
El futbolista de Colo Colo Jordhy Thompson aceptó una salida alternativa en el caso que enfrenta como imputado por los delitos de lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar y lesiones leves, a raíz de la denuncias presentadas por su expareja, Camila Sepúlveda, y una amiga de ella.
El jugador de 18 años recibió una propuesta de parte del Ministerio Público para suspender condicionalmente el juicio por un año, cumpliendo una serie de requisitos.
Entre ellas, según lo sostenido este martes en audiencia, quedó definido que Jordhy estará obligado a fijar un domicilio y en el caso de cambiarlo tendrá que informarlo al tribunal. Además quedó con prohibición de acercarse a Camila Sepúlveda y a Isidora García, que también figura como agredida.
También, Thompson tendrá que pagar una suma de 2.200.000 pesos como valor de un iPad y un teléfono de Camila Sepúlveda que éste rompió en medio de los hechos, para lo que tiene un plazo de 15 días.
Además, Jordhy no podrá contactarse de ninguna manera a ambas personas y también requiere someterse a evaluación y tratamiento para control de impulso y cualquier otro tipo de necesidades en acto de violencia intrafamiliar.
Si cumple con esto durante un año, se termina la causa y no es condenado. Si comete otro delito, se deja sin efecto la suspensión condicional, y tendrá que enfrentar el juicio normalmente y se realizarán otras audiencias.
El escándalo salió a la luz el 15 de marzo, cuando se difundieron en redes sociales unas imágenes en las que Thompson agredía físicamente a su novia de forma reiterada en una discoteca. No sólo ella resultó con lesiones: la amiga que la acompañaba denunció que la golpeó en el ojo derecho, cuando estaba supuestamente bajo los efectos del alcohol.
Luego se conoció que Camila Sepúlveda interpuso otra denuncia contra el deportista el 31 de marzo, por agresiones que habría sufrido en enero en el departamento que ambos compartían. Anteriormente la joven ya había realizado dos denuncias, las que fueron retiradas.
Ante el escándalo, el equipo decidió apartarle "de forma indefinida" de los entrenamientos, medida que mantuvo hasta el 8 de abril, en el que fue reintegrado.
Cuando se conoció el segundo episodio, el técnico del equipo, Gustavo Quinteros, dudó de los hechos y apuntó una posible responsabilidad de la víctima, lamentando únicamente no poder contar con el jugador: "Estamos tratando de ayudar a Jordhy Thompson a cambiar, que sea una persona mejor, que cambie su forma de ser, pero veo también que la otra persona debe tener ayuda también, para que no vuelvan a estar juntos", afirmó.
La respuesta del club provocó la reacción de la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, quien señaló al club por "el abordaje que se estaba haciendo" del caso y llamó a revisar "el modelo formativo que reciben al interior de las instituciones los deportistas" y qué están haciendo los clubes "para prevenir".