Hinchas ingleses fueron condenados a tres años sin ingresar a los estadios
Tribunal británico sentenció que dos de los hooligans deportados por Portugal deberán permanecer lejos de los coliseos cuando algún equipo inglés que juegue dentro o fuera del país.
Dos hinchas ingleses que fueron expulsados de Portugal tras protagonizar violentos altercados el lunes 14 de junio, tras la derrota de la selección inglesa por 1-2 frente a Francia en la Eurocopa, fueron castigados por un tribunal a permanecer lejos de los estadios nacionales o extranjeros por tres años.
Ricky Stables, de 19 años; y John Powey, de 20, deberán entregar sus pasaportes antes de cualquier partido que los equipos ingleses disputen fuera de su país y dentro de él, y tendrán que cumplir con una orden de alejamiento de los estadios de dos kilómetros.
Un panel de tres magistrados en el tribunal de Uxbridge (Londres), consideró que la conducta de los dos hinchas había "avergonzado al país".
"Es lamentable que los poderes de este tribunal estén limitados para actuar contra este comportamiento lamentable", dijo el presidente de los jueces, Gudrun Fickling.
Stables y Powey fueron arrestados el lunes 14 de junio y posteriormente deportados junto a otros ocho hooligans, tras casi cinco horas de incidentes en la ciudad portuguesa de Albufeira. (EFE)