Con un tanto del delantero Luca Toni a falta de 11 minutos para el final del partido, Italia sumó un sufrido, pero merecido triunfo por 2-1 ante la testaruda selección de Noruega en su debut en las clasificatorias europeas rumbo al Mundial de Alemania 2006.

 

En el debut oficial de Marcelo Lippi, la victoria sobre los escandinavos en Palermo supone los primeros tres puntos en la búsqueda del acceso a la cita germana y además el equipo divirtió, jugó el balón con mejor criterio que en la precedente era de Giovanni Trapattoni, y con un equipo joven y con debutantes supo reaccionar tras la ducha fría del temprano tanto noruego.

 

Lippi, a falta por lesión o sanción de jugadores del renombre de Alessandro del Piero, Christian Vieri, Fabio Cannavaro, Francesco Totti o Antonio Cassano, quiso dotar a su equipo de frescura dando entrada a los jóvenes Daniele Bonera y, sobre todo, los debutantes como internacionales Daniele de Rossi y Alberto Gilardino.

 

Noruega llegaba con una racha de ocho partidos consecutivos sin conocer la derrota y con más de seis años sin perder ante Italia, pero se fue de Palermo derrotado y castigado, pese a la buena labor de su portero Espen Johnsen, por su excesivo conservadurismo.

 

El partido, desde luego, no podía empezar más prometedor, pues llegaron dos goles cuando apenas se habían jugado cuatro minutos: el primero de ellos, anotado por el noruego John Carew cuando se llevaban 42 segundos desde el pitazo inicial.

 

El ariet de Besiktas de Turquía aprovechó un error defensivo tras saque de banda y se despachó un tiro cruzado ante la salida de Gianluigi Buffon. Sólo tres minutos después De Rossi remató hasta las redes un balón suelto dentro del área ante otro yerro defensivo.

 

Los tempraneros goles dieron paso a un partido menos frenético, de mayor atención defensiva y disputado. Noruega esperaba y el mando era para una Italia que contó con las únicas ocasiones para marcar: despejes del meta Espen Johnsen a sendos tiros de Fabrizio Miccoli.

 

El equipo del técnico Age Hareide pecaba de conformismo, pese a evidenciar desajustes defensivos por la zona central defensiva, y dejaba arriba a Carew peleándose demasiado en solitario con toda la defensa local.

 

Italia, con el buen desempeño en el centro del campo de De Rossi y la velocidad de Miccoli, divertía, y acariciaba su segundo tanto.

 

Pero el gol no llegaba. Con una Noruega aún más cerrada en propio campo tras el descanso y después de un nuevo mano a mano que le ganó el arquero noruego a Miccoli, Lippi mandó a la cancha a Luca Toni, quien cinco minutos después de haber ingresado marcó el gol del triunfo.

 

Toni en su segundo partido con la azzurra tocó un balón suave por entre las piernas del portero escandinavo para decretar el triunfo italiano y permitir el primer paso de Marcelo Lippi en el largo camino para llegar a Alemania. (EFE)